martes, 26 de abril de 2011

Familiares de la Agrupación de Víctimas del Franquismo han acudido al Pleno del Ayuntamiento a exigir justicia

PSOE e IU ya presentaron una moción conjunta hace un año para pedir al equipo de gobierno la declaración de la fosa común del  patio 4º del cementerio como “espacio para la memoria”.

Familiares de la Agrupación presentes en el Pleno. / Foro de la Memoria de Guadalajara

Miembros de la Agrupación de Familiares Víctimas de la Represión Franquista en Guadalajara han estado presentes en el Pleno del Ayuntamiento celebrado hoy, en el que PSOE e IU presentaban una moción conjunta de apoyo al proyecto que los familiares tienen en sus manos.

El portavoz socialista, Daniel Jiménez, recordaba que siempre se han consultado y pactado las ideas de colectivos para los que se han instalado otros monumentos conmemorativos en la ciudad. Por su parte, el edil de IU, José Luis Maximiliano, acusaba a los populares de confirmar “ser los herederos del franquismo” con este rechazo.

El portavoz del PP, Juan Antonio de las Heras, acompañaba a su negativa a tal aprobación la explicación del propio proyecto para el que el Ayuntamiento cuenta con una partida de 46.000€. Se trataría de un acondicionamiento de la zona con césped y piedra a modo de monumento funerario en recuerdo de todas las víctimas de la Guerra Civil, sin ningún tipo de mención a las personas fusiladas que descasan bajo esa tierra.

Los familiares aseguran no poder entender esta actitud y han abucheado al equipo de Román durante la defensa de la moción. A su juicio, la herida de la represión nunca ha sido cerrada y no incluir los nombres de los represaliados en el monumento persigue como único objetivo el que en un futuro nunca nadie se pregunte qué ocurrió allí. Aclaran que en esa zona no están todos, sólo están los fusilados durante el franquismo en defensa de la democracia. 

El proyecto de la Agrupación pretende dignificar la zona de la fosa común del patio 4º del cementerio con una actuación para la que cuentan con una subvención de 57.000€ del Gobierno estatal y un diseño del estudio de arquitectura de José Luis Vázquez Checa. Sólo necesitan que el equipo de Román les conceda la licencia de obra.

Tras varias reuniones con el propio alcalde y el concejal responsable del cementerio, Mariano del Castillo, la licencia ha sido denegada y la Agrupación de Familiares tiene miedo a perder la subvención ya que el plazo para la ejecución está a punto de concluir. 

Estado actual de la fosa común donde hubo más de 500 fusilados. /Agrupación de Familiares


Imagen del proyecto de la Agrupación. / Agrupación de familiares

domingo, 10 de abril de 2011

Evaluar el cambio

Es evidente, Guadalajara ha cambiado en esos cuatro últimos años. Las elecciones municipales están a la vuelta de la esquina y es tiempo de que los guadalajareños acudamos a las urnas para expresar si este cambio nos gusta o no.

La gestión de Antonio Román ha traído consigo polémicas actuaciones como la privatización de la gestión del agua, la aprobación de la famosa Ordenanza de Convivencia Ciudadana o el traslado del recinto Ferial al otro lado de la A-II en la periferia de la ciudad. Guadalajara ha cambiado también físicamente: el fondo del Plan E y el remanente resultante del proceso de privatización mencionado, han permitido a este Ayuntamiento ejecutar importantes obras como la del parque Adoratrices –antiguo recinto ferial–, la ciudad de la raqueta, el parque de Juan Bosco o la remodelación de todo el casco histórico.

Guadalajara sigue siendo una ciudad invisible y muy poco valorada. Una ciudad poco abierta a la participación ciudadana con un equipo de Gobierno que escucha muy poco la voz que emana de los barrios donde el movimiento vecinal va casi desapareciendo.

La voz de la calle sólo es escuchada cada cuatro años y en fechas cercanas a los comicios electorales. Ahora toca hablar, es momento de decidir si el cambio en Guadalajara es positivo, pero también tendremos que valorar si queremos o no un alcalde a tiempo parcial.

Guadalajara es una capital de provincia fuerte, grande y con muchas posibilidades. No se merece un alcalde con un pie aquí y otro en las Cortes regionales en Toledo. La maniobra del PP de Cospedal de convertir a Antonio Román en número uno de la lista electoral a las elecciones autonómicas responde a todo menos a los intereses de nuestra ciudad. Román ya hizo compatible su cargo como primer edil con el de senador o con el de médico en consulta privada por las tardes. No ha tenido en mente a la ciudad como objetivo único y este es otro cambio sustancial que debemos valorar.

Hace falta gente crítica

En la corta vida de la democracia de nuestro país, hemos podido comprobar en los últimos años un estancamiento en su evolución. El poder residente en el pueblo se ha traducido en una participación simbólica que cada cuatro años nos convoca a las urnas, algo que sabe a poco a muchos ciudadanos y que cada vez provoca una mayor pérdida de confianza en el sistema político. A causa de ese escepticismo, el monopolio de la democracia ha provocado una perdida radical de la capacidad de movilización de la ciudadanía y en contraposición la reacción de aquellos más concienciados con la situación. La plataforma ‘Más de Un Ciudadano’ formada por vecinos de Guadalajara es un ejemplo de ese inconformismo.

La capital de provincia se ha convertido en los últimos años en el claro ejemplo de ciudad dormitorio. Su proximidad a Madrid y las características que reúne como ciudad han contribuido a gestar una comunidad poco implicada en la actividad ciudadana, que ha permitido que los diferentes gobiernos que se han ido sucediendo hayan desempeñado un trabajo poco vinculado a las necesidades o preferencias de los ciudadanos, sin que dicha gestión haya recibido una oposición significativa por parte de los afectados.

La labor de la plataforma ciudadana es precisamente acabar con esa impasibilidad en la que hemos ido cayendo en los últimos años. No se trata únicamente de dotar a la ciudadanía de una mayor capacidad de intervención en la política local, sino de involucrarla en la toma de decisiones y fomentar una actitud crítica ante estas. Es muy importante caminar hacia un modelo de gobierno más participativo, pero más importante es romper con la tendencia a la indiferencia ciudadana que los actuales modos de vida provocan en la gente.

Dentro de esta problemática general, entraña una verdadera preocupación el papel que desempeñan los más jóvenes. Sin duda es uno de los aspectos más característicos de Guadalajara, ya que pese a que el número de jóvenes es relativamente alto en comparación con la población total, apenas se intuye ningún movimiento de implicación juvenil con los problemas de la ciudad. El desinterés y el conformismo han acabado con la capacidad de reacción y las expectativas de la gente se limitan a conseguir un mínimo de estabilidad para poder seguir adelante con su vida. Da igual si se privatizan los servicios de suministro de agua, si desciende la inversión en actos culturales o si se lleva a cabo una política de favoritismo por parte de los dirigentes políticos; la gente joven se mueve entre el desencanto y el pasotismo.

El aumento del bienestar, el crecimiento económico, las mejoras sociales, las nuevas tecnologías, nuevos modelos de consumo; son algunos de los factores que en poco tiempo han creado un nuevo modo de vida. Un modo de vida que se ha traducido en una pérdida de la conciencia ciudadana y en la capacidad de crítica y movilización de la gente, aunque no de toda. Iniciativas como la de ‘Más de Un Ciudadano’ cada vez se hacen más frecuentes. Gente consciente del problema y que quiere cambiar la situación. Gente que quiere proponer alternativas al modelo político que ha provocado la muerte del ciudadano.

¡QUÉ ESTÁIS DORMIDOS!